El parapentista Horacio Llorens ha pasado la noche en el cráter de un volcán activo en Tanzania. Este madrileño, junto a su compañero belga Thomas de Dordolot, lleva en África desde diciembre sobrevolando el continente y ya ha cruzado países como Egipto, Sudan, Etiopía y Kenia.
Llegaron a África a mediados de diciembre de 2011 con un sueño, volar con su parapente por encima de lugares tan emblemáticos como el Nilo, las pirámides de Jebel Barkal o el Parque natural de Simiens Mountains.
Una tormenta se acercaba a los dos atletas y ponía en peligro el vuelo. "Tom decidió aterrizar pero yo no quería quedarme sin ver el cráter del volcán ,que había tenido una explosión hace tan solo 4 años, y presentaba un cráter redondo perfecto. Aterricé en la cima con algo de dificultad por el fuerte viento, dejé mi equipo y me puse a andar y disfrutar de las increíbles vistas".
Cuando llegué al cráter aluciné con el espectáculo
Poco después se levantó un viento de más de 80 km/h que no le permitió despegar y Horacio tuvo que pasar la noche allí. "Cuando llegué al cráter aluciné con el espectáculo. El volcán, aun activo, tenía un sonido constante de lava en movimiento y varios chorros de gas con un fuerte olor a azufre”, comenta este madrileño de 29 años.
Doy gracias de que el volcán también durmiera aquella noche
Tras pasar la noche allí, Horacio tuvo que esperar a mediodía hasta que se despejaron las nubes para poder tomar vuelo. "Por la mañana, establecí contacto por radio con mis compañeros y desde abajo me dijeron que pintaba mal el panorama, muchas nubes bajas que tapaban todos los picos. A medio día comencé a ver por fin el valle poco a poco. Doy gracias de que el volcán también durmiera aquella noche conmigo",
No hay comentarios:
Publicar un comentario